Chanel, una carta de amor a Deauville
Chanel rinde homenaje a sus inicios en la próxima colección otoño-invierno 2025.
Una colección que busca en Deauville su esencia más pura para captar la atención de todo aquel que, en los meses venideros, se cruce con una creación de la maison francesa.
Corría 1913 cuando Coco Chanel eligió la localidad normanda de Deauville para abrir su primera tienda. Más de un siglo después, Virginie Viard, directora creativa de la firma, nos invita a viajar hasta ese rinconcito para dejarnos enamorar por lo nuevo de Chanel.
Una colección repleta de looks relajados con guiño francés y maxi sombreros que no dejará indiferente a nadie.
Hablar de Chanel es hacerlo de la maison en mayúsculas: un auténtico deleite para los sentidos de quienes aman el fascinante mundo de la alta costura.
A ese mundo pertenece Chanel por derecho propio, que, a pesar del tiempo, sigue teniendo mucho que hacer y que decir.
Para la próxima temporada otoño-invierno 2025, Chanel nos invita a impregnarnos de su espíritu más esencial, pero también más renovado.
Ante nosotros se abre una colección repleta de detalles llenos de majestuosidad en la que las prendas de abrigo tendrán un lugar más que destacado. Cortes maxi, modelos de cuerpo, pellizas…
Todo ello con un patrón que se repite, en el que los hombros se redondean y las cinturas se matizan y afinan.
Chanel recupera su esencia más pura en una colección en la que Virginie Viard vuelve a confiar en la camiseta de rayas marineras, el tweed, o el punto, que marcó el inicio de una estilo audaz y sencillo que, con el paso de los años, se ha convertido en un auténtico icono que perdurará a lo largo de los siglos.
Un icono de moda que la directora creativa de la maison ha elegido como inspiración de todas las creaciones con las que la mujer de la próxima temporada vestirá sus jornadas más inspiradoras.
Se trata de un icono que también deja paso a nuevos aires que encuentran en el denim su mejor aliado.
Así, el mítico tweed firma de Chanel deja espacio al denim, que no solo se presenta en los tradicionales pantalones vaqueros, sino que se apodera de sobrecamisas, chalecos o culottes que, a la vez, se combinan con prendas propias del invierno más puro como jerséis de punto, chaquetas de tricot y abrigos largos que se apuntan al efecto tie-dye.
Sin duda, todo un homenaje al universo vaquero que no camina solo. Junto al denim, la piel de doble vuelta, usada principalmente en los abrigos y los bolsos; los estampados, evocadores de cándidos paisajes. Los cuadros y los bordados de flores en clave de joya decoran los looks más nocturnos y sofisticados.
Y como pieza clave de este universo con sabor a Chanel, la pamela como complemento estrella, aportando un toque de lo más chic a los looks de la maison francesa.
Las pamelas se ofrecen en una variedad de colores entre los que se encuentran desde el rosa palo al verde menta, pasando por la escala de grises y los blancos, para terminar en los negros.
Como elemento común a todas ellas, además de su tamaño, forma y material, se cuenta con un broche joya en su parte frontal que las convierte en verdaderas piezas de coleccionista.
Por último, el mundo de los accesorios con marca Chanel se completa esta temporada con botas over-the-knee, cinturones de piel, guantes de ópera, collares y boinas; complementos con los que conseguir un look distinguido a la par que sofisticado para convertirse en la verdadera reina de la fiesta.
Para esas veladas de ensueño, el negro es el protagonista. Vestidos satinados de escote en pico, faldas fluidas, blusas y pantalones con un sugerente toque lencero, monos de piel de corte utilitario, cuerpos bordados con pedrería…
Todo impregnado con el exclusivo toque Chanel que, como siempre, no defrauda.