Galia Lahav envuelve a la mujer en el arte más suave y floral.
Galia Lahav busca en el arte la mejor herramienta para convertir a la mujer en musa de las veladas más seductoras
Como si de una auténtica galería de arte se tratase. Así escenifica Galia Lahav la próxima temporada otoño-invierno, en la que la mujer se deja seducir por materiales vibrantes que evocan tranquilas tardes de playa. La diseñadora se impregna del arte expresionista e impresionista más puro para conseguir llenar el armario femenino de combinaciones propias de una ceremonia llena de feminidad y romanticismo.
Siluetas y formas coquetas que buscan irradiar la belleza interior de una mujer que celebra la juventud sin miedos ni tabúes. Creaciones en colores valientes y frescos como el verde esmeralda, el rosa pastel y el azul eléctrico, que aportan aires juguetones y sensuales. Y como complemento perfecto, el negro, convertido en simbolo de la madurez y el glamur más exquisito y exclusivo.
Galia Lahav busca que la mujer haga lo que quiera cuando quiera y que brille con luz propia sin miedo a evolucionar y encontrar su sitio. Pantalones de seda se combinan con faldas de aberturas y volúmenes imposibles; gasas y tules evocadores de la más ansiada libertad cubren creaciones adornadas de impresionantes y gigantescas flores en tres dimensiones; lamés, transparencias y lentejuelas dan paso a bordados de neón que proporcionan el contraste necesario para llenar de modernidad piezas que, en ocasiones, evocan encuentros sociales de la mismísima década de los cincuenta. Contrastes irreverentes nacidos para una mujer que grita a los cuatro vientos su independencia más irreverente.