Zuhair Murad y el imperio de los zares.
Zuhair Murad invita a la mujer a hacer un viaje a la Rusia más imperial donde busca convertirla en una auténtica zarina del lujo.
Pensar en alta costura y sofisticación es hacerlo, sin duda, en Zuhair Murad. El diseñador libanés nos invita a viajar a la Rusia más cosmopolita y lujosa de la mano de una colección que nada tiene que envidiar a las obras de arte que albergan palacios y palacetes de la más alta nobleza de San Petersburgo.
Brillos y ostentación en los que Murad encuentra la mejor manera de viajar a una época remota y llena de lujos. Feminidad en su máximo esplendor a través de vestidos hermosamente bordados, motivos florales y grandes ornamentaciones, que dan forma a creaciones convertidas en auténticas obras de arte.
Trajes sacados del mismísimo ejército ruso adornados con brillantes, cristales, brocados y lentejuelas que se convierten en creaciones ennoblecidas con sedas, tules, gasas y terciopelos y que terminan alzándose como símbolo claro de una feminidad desbordante y exacerbada. Una refinada colección soñada por Zuhair Murad que busca transfomar la mujer en una auténtica emperatriz del lujo y de la sofisticación y encuentra en elementos propios de la alta costura las herramientas clave para salir airosa de cualquier batalla. Feroces guerreras sofisticadas que envuelven sus curvas en negro, rojo, dorado, azul noche y tonalidades perladas con las que desafían las miradas más insolentes.
Pantalones de tallaje exquisito, faldas de sensualidad infinita, drapeados y encajes que dan forma a auténticas esculturas en movimiento se convierten en un guiño exclusivo de Zuhair Murad a quienes desean volar sobre el epicentro del lujo.