Chopard y su alfombra roja del amor
Pasión por vivir. Solo así podríamos definir todo lo que hace sentir cada creación ideada por Chopard. Un auténtico deleite para los sentidos.
Amor por lo que hace. Amor en cada brillante que engarza… amor en cada pieza que diseña… amor en cada combinación que regala a quienes buscan encontrar en la prestigiosa casa suiza la mejor de las excusas para dejarse llevar por un lujo grandilocuente que todo lo envuelve…
AMOR en mayúsculas que ha llevado a la maison de alta joyería de origen suizo a utilizar este sentimiento para dar nombre a la colección con la que Chopard pretende que este 2019 llenemos de lujo y sofisticación todos y cada uno de nuestros momentos más especiales.
Y es que Chopard vuelve a sorprendernos con una creatividad a raudales con la que da forma a piezas únicas dignas de cualquier estrella del celuloide durante la alfombra roja más exclusiva del lujo y la elegancia.
Piezas a través de las que, Caroline Scheufele, copresidenta y directora artística de la firma, ha traducido todo lo que la rodea en una intensa luz capaz de irradiar al exterior un esplendor escondido lleno de magia, con el que consigue cegar a todo aquel que se acerca, curioso, a descubrir lo que se esconde en el corazón de cada joya.
Chopard nos ofrece una colección en la que se reinventa el amor con todas sus letras; un amor que se celebra sin miedos ni artificios y que ofrece a quienes se acercan a él historias llenas de bonitos detalles, únicamente percibidos por quienes son capaces de ver lo que realmente es invisible a los ojos.
Se presenta así un sinfín de piezas en las que Chopard y su directora creativa ofrecen —de manera magistral— una paleta de colores, materiales y formas que dan lugar a una colección única en la que cada pieza esconde una historia única, llena de vida y muy personal que invita a vivir y a amar cada instante de la existencia.
Y es ese amor por la vida el que da sentido a la colección Red Carpet, en la que ese sentimiento universal se plasma en sus formas más diversas y de lujo desmedido.
Collares, pulseras, anillos, broches, relojes joya… que ofrecen un concepto del amor totalmente renovado y legendario a través de increíbles piedras preciosas que no dejarán indiferente a nadie.
En medio de este amor sin medida, el color. Un color en el que Chopard confía y llegado a partir de magistrales combinaciones de las gemas de las tonalidades más exquisitas que evocan sueños propios de cuentos de reyes y princesas… un color nacido de la simbiosis perfecta y delicada de zafiros, rubíes, esmeraldas y amatistas que con sus destellos nos invitan a perdernos en instantes únicos en los que conseguiremos convertirnos en epicentro de todas las miradas en las más exclusivas veladas.
Un auténtico deleite para los sentidos en el que las flores —como en cualquier declaración de amor que se precie— también tienen mucho que decir. Orquídeas adornadas con piedras preciosas a través de las que Chopard nos hechiza y nos lleva a entrar de lleno en el juego de la seducción más irreverente.